En Malpica siempre se ha conocido como EL MURO al contrafuerte exterior que se hunde en el Tajo a la esquina del Castillo, sirviendo de protección al edificio frente a la erosión del río, sobre todo en las fuertes crecidas periódicas que el río tenía antiguamente.

"Cruzar al muro" a nado era la ilusión de todos los muchachos de mi tiempo; una especie de desafío adolescente como afirmación de fuerza y de valor. Eso era cuando por el Tajo todavía pasaba agua y el río en verano era una fiesta.

Pero el muro no siempre estuvo ahí; es una obra relativamente reciente.

En 1825 Fermín Caballero levantó un detallado plano del Castillo. Y en ese plano el muro todavía no existía. De hecho, en ese tiempo, una gran crecida había causado un derrumbe que llegó muy cerca de la puerta principal del edificio, como se aprecia en el plano.  El "Murallón bañado por el Río Tajo" carecía de la protección del muro.

Se comprende así que la amada del poema de Caballero (supuestamente la marquesa), sintiera "susto, pavor y miedo" por la amenaza del río. Véase: https://www.malpicadetajo.es/index.php?option=com_content&view=article&id=384:el-poema-de-fermin-caballero-al-tajo-en-malpica-y-la-misteriosa-amarilis&catid=90&Itemid=895

En 1881 el mapa del Instituto Geográfico Estadístico muestra con precisión que el muro tampoco existía todavía.

Basta comparar la imagen con una actual de Google.

Y en una reciente foto de Aurora de Pablos, se aprecia muy bien a simple vista que la construcción del muro es mucho más sólida y reciente, frente a las antiguas murallas exteriores del castillo que seguramente conservan la construcción original árabe (Siglo X/XI) con alguna reparación como la de 1825/26.

Paco Corral                                                                                                                                   22/9/2022